Austria | |
| |
Austria es uno de los países de la Unión Europea que cuenta con una larga tradición vitivinícola, que según algunos historiadores se remonta hace 2.700 años; esto debido a que se encontró en una tumba en la región de Burgerland unas semillas de la variedad Vitis vinifera. Con más certeza se sabe que los Celtas producían vino en esas tierras. Pero no fue hasta la llegada de los romanos que se impulso su cultivo y consumo; más tarde, los eslavos y ávaros serían los que asentaron su arraigo en la región. En la actualidad, la producción vitivinícola en Austria está regida por una fuerte legislación que garantiza su calidad y controla su producción. Debido a su orografía y las condiciones climatológicas, la totalidad de la variedades de vino austríaco se producen en las regiones más orientales del país: Nieder Osterreich, Steiermark, Wien y Burgenland. De ellos, aproximadamente un tercio de los vinos austriacos se producen en Burgenland, donde radican 539 bodegas estratégicamente dispuestas en sus 14.500 hectáreas (48.00 acres) dividida en cuatro subregiones: Neusiedlersee, Neusiedlersee-Hügeland/Leithaberg, Mittelburgenland y Eisenberg / Südburgenland. En ellas, se elaboran principalmente tres variedades de vino: blanco, dulce y rosado. Las dos primeras proceden de la parte nor-oriental, una zona de tierras fértiles bañadas por el lago Neusiedlersee y Neusiedlersee-Hügeland/Leithaberg. De las zonas central y sur de Burgerland: Mittelburgenland y Eisenberg / Sudbergenland, proceden los vinos rosados, que se elaboran a partir de dos tipos de uva: "Zweigelt"; una variedad de uva roja conseguida en 1922 por Fritz Zweigelt, para Instituto Federal de la Viticultura y Fruticultura de Klosterneuburg, y la "Blaufränkische", uva de color azulado intenso; variedad también muy utilizada entre los viticultores alemanes y húngaros. Además de la producción vitivinícola, la región de Burgenland posee un variado catálogo de atractivos turísticos para todos los gustos. Empezaremos por su capital Eisenstadt, donde podemos visitar el Palacio de Esterházy. Que ofrece a los visitantes visitas guiadas por sus estancias e incluso conciertos en la sala Haydn, una de las más bonitas del mundo, que lleva ese nombre en honor al compositor Joseph Haydn quién fue director de orquesta en la corte de la familia Esterházy durante cuatro décadas. Además de poder visitar otros monumentos en honor a Haydn, el casco viejo de la ciudad, a través de sus calles peatonales y jardines que nos mostrará su rico patrimonio y hará volar la imaginación del visitante hasta el siglo XVIII. Para los amantes de la naturaleza, Burgerland ofrece plácidos paseos en bicicleta o a caballo por el Parque Nacional de Neusiedler See/Seewinkel, declarado patrimonio cultural por la Unesco; donde poder disfrutar de su flora y fauna aviar. Practicar deportes acuáticos en sus lagos o relajarse en los balnearios de Lutzmannsburg-Frankenau, donde podemos pasear por parte de los 54 kilómetros de la vía romana de Amber, muy bien conservados. Los spas termales de Bad Tatzmannsdorf, rodeado de suaves campiñas, o de Stegersbach especialmente pensado para el turismo familiar.
|
|
Más destinos del vino: |
|